Firma de Canje de Notas con el Programa Mundial de Alimentos

2025/12/5
  El 5 de diciembre, en la Oficina del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Guatemala, el Embajador de Japón, KUWANA Ryosuke, llevó a cabo, junto con el Sr. Andrew Stanhope, Representante de WFP en Guatemala, la firma del Canje de Notas relativo a la Cooperación Financiera No Reembolsable para el “Proyecto para Mejorar la Resiliencia de las Comunidades Indígenas mediante la Promoción de la Gestión Agrícola Sostenible, el Desarrollo de Instalaciones de Procesamiento Postcosecha y la Mejora de la Nutrición (en colaboración con WFP)”.
  La ceremonia contó con la distinguida presencia de la Viceministra de Relaciones Exteriores, Embajadora María Lucía Ramírez Coronado.


(De Izquierda a Derecha)Embajador Sr. KUWANA, Viceministra Sra. Ramírez,
Representante Sr. Stanhope

  El Gobierno del Japón aportará 472 millones de yenes (equivalentes a 3 millones de dólares estadounidenses) para la implementación de este proyecto durante los próximos tres años por parte de PMA. Asimismo, la iniciativa será ejecutada en estrecha coordinación con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) y el Ministerio de Relaciones Exteriores (MINEX).
 

Firma de Canje de Notas

  El departamento de Alta Verapaz, área prioritaria de esta cooperación, registra los índices de pobreza más altos del país: cerca del 90 % de su población vive en condición de pobreza y alrededor del 60 % en pobreza extrema. La inseguridad alimentaria y la desnutrición son problemas persistentes. Las comunidades indígenas, especialmente las mujeres, enfrentan salarios bajos, oportunidades educativas limitadas y condiciones de alta vulnerabilidad económica y social.
 
  Mediante esta cooperación, dirigida a mujeres indígenas y a sus hogares, se proporcionarán equipos agrícolas, asistencia técnica, insumos y capacitaciones para emprendimientos, entre otros, con el fin de mejorar la productividad agrícola, fortalecer el empoderamiento femenino y dinamizar la economía local, contribuyendo así a reducir las causas estructurales de la migración.
 
  Se espera que esta cooperación contribuya a mejorar las condiciones de vida de las comunidades indígenas y a reducir la vulnerabilidad de los migrantes potenciales, promoviendo con ello la estabilidad de la región.